El Papa que paga sus cuentas.Leonardo Boff


(Tomado de ATRIO. http://www.atrio.org.  Con comentarios )

El Papa que paga sus cuentas

Leonardo Boff, 25-Marzo-2013

BoffLo que convence a las personas no son las prédicas sino las prácticas. Las ideas pueden iluminar, pero los ejemplos son los que atraen y nos ponen en marcha. Los ejemplos los entiende todo el mundo. Muchas explicaciones confunden más que aclaran. Las prácticas hablan por sí solas.

Lo que ha marcado al nuevo Papa Francisco, ese «que viene del fin del mundo», es decir, fuera de los marcos europeos tan cargados de tradiciones, palacios, espectáculos principescos y disputas internas de poder, son gestos simples, populares, obvios para quien da valor al buen sentido común de la vida. Él está rompiendo los protocolos y mostrando que el poder es siempre una máscara y un teatro, como bien puntualizó el sociólogo Peter Berger, aunque se trate de un poder pretendidamente de origen divino.

El Papa Francisco simplemente obedece al mandato de Jesús que explícitamente dijo que los grandes de este mundo mandan y dominan pero “con vosotros no debe ser así; quien quiera ser grande, que sea servidor; quien quiera ser el primero, que sea siervo de todos; pues el Hijo del Hombre no vino para ser servido sino para servir” (Mc 10-43-45). Bien, si Jesús dijo eso, ¿cómo puede el Papa, garante de su mensaje, obrar de otra manera?

Ciertamente con el establecimiento de la monarquía absoluta de los papas, especialmente a partir del segundo milenio, la institución eclesiástica heredó los símbolos del poder imperial romano y de la nobleza feudal: ropas vistosas (como las de los cardenales), oropeles, cruces y anillos de oro y plata y hábitos de palacio. En los grandes conventos religiosos que vienen de la Edad Media se vivía en espacios palaciegos.

En el cuarto en el que me hospedaba, como estudiante, en el convento franciscano de Múnich, que remonta al tiempo de Guillermo de Ockham (siglo XIV), un solo cuadro renacentista de la pared valía algunos miles de euros. ¿Cómo conjugar la pobreza del Nazareno que no tenía donde reposar su cabeza con las mitras, los báculos dorados y las estolas y ropas principescas de los prelados actuales? Honestamente no es posible. Y el pueblo que no es ignorante, sino fino observador, nota esta contradicción. Todo este aparato no tiene nada que ver con la Tradición de Jesús y de los Apóstoles.

Según algunos periódicos, cuando el secretario del Cónclave quiso poner sobre los hombros del Papa Francisco la «muceta», esa capita ricamente adornada, símbolo del poder papal, se limitó a decir: “El carnaval  acabó, guarde esta ropa”. Y apareció  vestido de blanco, como también acostumbraba a vestir dom Helder Câmara, que dejó el palacio colonial de Olinda y fue a vivir bajo un tejado de media agua en la iglesia de las Candelas, en la periferia; como también hizo el cardenal dom Paulo Evaristo Arns, por no hablar de dom Pedro Casaldáliga que vive en una casita pobre, compartiendo el cuarto con algún huésped.

Para mí el gesto más simple, honesto y popular del Papa Francisco fue ir a la residencia donde se había alojado (nunca se alojaba en la grande casa central de los jesuitas en Roma) a pagar la cuenta a razón de 90 euros por día. Entró y él mismo fue a buscar su ropa, hizo su maleta, saludó al personal y se fue. ¿Qué potentado civil, qué opulento millonario, qué famoso artista haría tal cosa? Sería falsear la intención del obispo de Roma querer ver en este gesto, normal para todos nosotros mortales, una intención populista.

¿No hacía lo mismo cuando era cardenal de Buenos Aires e iba a buscar el periódico, hacia la compra, viajaba en metro o en autobús y prefería presentarse como «padre Bergoglio»?

Frei Betto acuñó una expresión que es una gran verdad: «la cabeza piensa desde donde pisan los pies». Efectivamente, si alguien pisa siempre palacios y  suntuosas catedrales, acaba pensando según la lógica de los palacios y de las catedrales. Por esta razón, el domingo celebró misa en la capilla de Santa Ana, dentro del Vaticano, que es considerada la parroquia romana del Papa. Y después salió a saludar a los fieles a la puerta.

Cosa notable y cargada de contenido teológico: no se presentó como Papa, sino como «obispo de Roma». Pidió oraciones no para el Papa emérito Benedicto XVI, sino para el obispo emérito de Roma, Joseph Ratzinger. Con esto retomó la más primordial tradición de la Iglesia, la de considerar al obispo de Roma «el primero entre sus pares». Por estar Pedro y Pablo sepultados en ella, adquirió especial preeminencia. Pero ese poder simbólico y espiritual era ejercido en el estilo de la caridad  y no en forma de poder jurídico sobre las demás Iglesias, como predominó en el segundo milenio. No me admiraría en absoluto si, como quería Juan Pablo I, resolviese abandonar el Vaticano y fuera a vivir a un sitio sencillo, con un amplio espacio exterior para recibir la visita de los fieles. Los tiempos están maduros para este tipo de revolución en las costumbres papales. Y qué desafío está representando para los demás prelados de la Iglesia vivir la sencillez voluntaria y la sobriedad compartida.

Traducción de Mª José Gavito Milano

6 comments to El Papa que paga sus cuentas

  • Javier Renobales Scheifler

    Me temo que sería lo mismo Pepe Blanco. Siempre será un cardenal del dictador católico del Vaticano.
    El sistema lo tiene todo atado y bien atado. Los progresistas católicos son primero católicos, y luego, sólo en lo que el catolicismo les deje, son progresisitas
    ¿Qué queda de tu pobre margarita?

  • pepe blanco

    No sabía en cuál de los veintiún artículos sobre el papa Francisco colgados en Atrio hacer este comentario. Lo pongo aquí, simplemente porque es el último.

    Hay un aspecto preocupante en la elección del jesuita Bergoglio como papa. Y es que podemos pensar que su elección facilita el que, en el futuro, sea elegido un cardenal del Opus Dei, por ejemplo.

  • Antonio Vicedo

    Muy bueno el que todos estos signos que el hermano Francisco (Por lo de Jesús: A nadie llaméis padre sobre la tierra) empezó a dar y continúa dando que sorprenden porque vienen al ambiente que vienen y se incluyen  en el ambiente actual de la espectacularidad y la pompa del poder vaticanos y eclesiales.

    Cierto que pueden significar, o significan expresión decidida de un compromiso real de prácticas apostólicas (por lo de enviados a proclamar la Buena Noticia a los pobres y, en ellos, a toda la Humanidad) acorde con ese: COMO el Padre me envió (Y hoy, agradecidos, conmemoramos la Encarnación) ASÍ os envío yo a vosotros, pero estos signos aún no comprometen la ruta, si no se percibe de inmediato el avance hacia lo que su autenticidad debe significar y exige.

    Lógico que, para quienes observamos el cambio de orientación, signifique esto un motivo de esperanza y confianza en que, con esta orientación de la ruta,  se puede ir aproximando la llegada a buen puerto, si no se interpone algún desvío, pero es precisamente esta posibilidad, tan convertida en realidad a lo largo de la historia de la Iglesia, después de los inicios de movimientos renovadores, incluido el  del Poverello de Asís con signos y orientaciones evangélicos tan especiales, que conviene estar atentos para que no cunda la infección de culto infantilista a la personalidad del papa

    Los gestos o frutos por los que se va a calificar el carisma petrino de Francisco, están por llegar y el valor de su coherencia les vendrá del parecido con los  más decisivos, permanentes y claros de Jesús.

    La Iglesia y la Humanidad necesitan ir comprobando cada día la respuesta práctica que Francisco dé a esta sencilla pregunta cada mañana al despertar:
    ¿Qué harías, Jesús, y cómo te comportarías hoy,  si tuvieras que vivir en mis circunstancias?

    Y como, las circunstancias estructurales y ambientales generales, no han cambiado tanto como para que Jesús se tenga que cuestionar modos nuevos y diferentes de reaccionar ante ella, la respuesta ya está dada a poco que se la quiera escuchar, respecto a: lo religioso,  lo político;  lo concreto socio-cultural,  lo económico y a  lo interpersonal próximo, o general.

    ¿Nos ha de servir a tod*s de algo ese:-“Buscad primero el Reino del Padre en y para TOD*S sus hij*s human*s aquí en la tierra y SU Justicia, porque todo lo demás vendrá por añadidura?
    Pues eso esperamos, mientras intentamos poner lo que nos corresponde de nuestra parte.

  • Rodrigo Olvera

    p.d
    Digo que es significativo que retome las distinciones de la Dominus Iesus, negándoles el carácter de iglesias a las iglesias reformadas, porque ahí sí que se muestra una continuidad ideológica, más allá de las “rupturas” de estilo, con Ratzinger.

  • Rodrigo Olvera

    Bueno, pues para profundizar en análisis de discurso:
    Yo por supuesto noté y me agradó, que el 13 de marzo se presentara desde el balcón frente a la Plaza de San Pedro como Obispo de Roma y no como Papa. Utilizó cinco veces la expresión Obispo en referencia al Obsipo de Roma  (sea el emérito o él mismo) y ni una vez la expresión Papa
    También noté , que el 15 de marzo dentro de la Sala Clementina ante los Cardenales se presentó como Papa y no como Obispo de Roma. Utilizó tres veces la expresión Papa y ni una vez la expresión Obispo de Roma.
    Luego, el 16 de marzo en la Sala Pablo VI ante los periodistas utilizó una vez la expresión Papa y una vez la expresión  Obispo de Roma.
    El 20 de marzo en la Sala Clementina ante representantes de iglesias, comunidades eclesiales y otras religiones, utilizó una vez “Obispo de Roma y Sucesor de Pedro” y una vez la expresión Papa para referirse a Juan XXIII . [Significativo que retoma las distinciones de Ratzinger en la Dominus Iesus para referirse a las distintas delegaciones]
    El 22 de marzo en la Sala Regia ante el cuerpo diplomático, utiliza dos veces la expresión Papa, dos veces la expresión Obispo de Roma y una vez la expresión Pontífice

    Así que sí, por supuesto que es significativo que en su primer discurso ante el pueblo usara Obispo de Roma y no Papa. Pero parece que no tiene tanta importancia como la que se le ha dado en ciertos ambientes. Usa ambas expresiones. Parece que las usa dependiendo los destinatarios. Lo cual por supuesto no es reprochable. Toda buena comunicadora y todo buen comunicador ha de saber adaptarse a su auditorio. Pero debe prevenirnos de que le demos demasiada importancia a lo que escuchamos adpatado a lo que queremos escuchar.

  • José Ignacio Ardid

    ¡Paz a todos!

    Una vez más el artículo de Leonardo Boff está lleno de sabiduría y me ha ayudado a reflexionar sobre el valor de los gestos como símbolos de aquello que estamos fraguando muy dentro de nosotros mismos. De ahí, también, la importancia de todos los gestos que está haciendo el Papa y que nos hace mirar la vida y la de la Iglesia con algo más de esperanza.

    Saludos,

La Piedad. En el jardín central. Maestro Luis González y esposa María Céliz Pérez


La Piedad. En el jardín central. Maestro Luis González Chávez y su esposa María Céliz Pérez

Publicado el marzo 22, 2013 por silviano | Editar
Rate This

Estampas en el jardín central de La Piedad, con los maestros Luis González Chávez, el maestro Luisito, como se le conoce, y su esposa la maestra María Celiz Pérez. En fecha reciente, el maestro publicó una obra colectiva cuyo título es “Breve Antología Poética Navideña”. En dicha obra participaron también, entre otros, Fernando Tejeda Alvarado y Jorge Alvarado Quiróz. El maestro Luisito y compañeros, forman un círculo literario de amantes de la cultura, sin desprenderse de las raíces, de sus raíces regionales, y como buenos piedadenses, amantes del terruño, como los que más. Texto y fotos de Silviano Martínez Campos.

DSCN0992
DSCN1068

DSCN1069
DSCN1067

DSCN0998
DSCN1072

DSCN1004

DSCN1003
DSCN0996
DSCN0993
DSCN1116
DSCN1073
DSCN1074

DSCN1071
DSCN1076
Voladores de Papantla

Inicio del ministerio petrino de Francisco, obispo de Roma y Papa. Homilía


SANTA MISA
IMPOSICIÓN DEL PALIO
Y ENTREGA DEL ANILLO DEL PESCADOR
EN EL SOLEMNE INICIO DEL MINISTERIO PETRINO
DEL OBISPO DE ROMA

HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO

Plaza de San Pedro
Martes 19 de marzo de 2013
Solemnidad de San José


Galería fotográfica

Queridos hermanos y hermanas

Doy gracias al Señor por poder celebrar esta Santa Misa de comienzo del ministerio petrino en la solemnidad de san José, esposo de la Virgen María y patrono de la Iglesia universal: es una coincidencia muy rica de significado, y es también el onomástico de mi venerado Predecesor: le estamos cercanos con la oración, llena de afecto y gratitud.

Saludo con afecto a los hermanos Cardenales y Obispos, a los presbíteros, diáconos, religiosos y religiosas y a todos los fieles laicos. Agradezco por su presencia a los representantes de las otras Iglesias y Comunidades eclesiales, así como a los representantes de la comunidad judía y otras comunidades religiosas. Dirijo un cordial saludo a los Jefes de Estado y de Gobierno, a las delegaciones oficiales de tantos países del mundo y al Cuerpo Diplomático.

Hemos escuchado en el Evangelio que «José hizo lo que el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer» (Mt 1,24). En estas palabras se encierra ya la la misión que Dios confía a José, la de ser custos, custodio. Custodio ¿de quién? De María y Jesús; pero es una custodia que se alarga luego a la Iglesia, como ha señalado el beato Juan Pablo II: «Al igual que cuidó amorosamente a María y se dedicó con gozoso empeño a la educación de Jesucristo, también custodia y protege su cuerpo místico, la Iglesia, de la que la Virgen Santa es figura y modelo» (Exhort. ap. Redemptoris Custos, 1).

¿Cómo ejerce José esta custodia? Con discreción, con humildad, en silencio, pero con una presencia constante y una fidelidad y total, aun cuando no comprende. Desde su matrimonio con María hasta el episodio de Jesús en el Templo de Jerusalén a los doce años, acompaña en todo momento con esmero y amor. Está junto a María, su esposa, tanto en los momentos serenos de la vida como los difíciles, en el viaje a Belén para el censo y en las horas temblorosas y gozosas del parto; en el momento dramático de la huida a Egipto y en la afanosa búsqueda de su hijo en el Templo; y después en la vida cotidiana en la casa de Nazaret, en el taller donde enseñó el oficio a Jesús

¿Cómo vive José su vocación como custodio de María, de Jesús, de la Iglesia? Con la atención constante a Dios, abierto a sus signos, disponible a su proyecto, y no tanto al propio;  y eso es lo que Dios le pidió a David, como hemos escuchado en la primera Lectura: Dios no quiere una casa construida por el hombre, sino la fidelidad a su palabra, a su designio; y es Dios mismo quien construye la casa, pero de piedras vivas marcadas por su Espíritu. Y José es «custodio» porque sabe escuchar a Dios, se deja guiar por su voluntad, y precisamente por eso es más sensible aún a las personas que se le han confiado, sabe cómo leer con realismo los acontecimientos, está atento a lo que le rodea, y sabe tomar las decisiones más sensatas. En él, queridos amigos, vemos cómo se responde a la llamada de Dios, con disponibilidad, con prontitud; pero vemos también cuál es el centro de la vocación cristiana: Cristo. Guardemos a Cristo en nuestra vida, para guardar a los demás, salvaguardar la creación.

Pero la vocación de custodiar no sólo nos atañe a nosotros, los cristianos, sino que tiene una dimensión que antecede y que es simplemente humana, corresponde a todos. Es custodiar toda la creación, la belleza de la creación, como se nos dice en el libro del Génesis y como nos muestra san Francisco de Asís: es tener respeto por todas las criaturas de Dios y por el entorno en el que vivimos. Es custodiar a la gente, el preocuparse por todos, por cada uno, con amor, especialmente por los niños, los ancianos, quienes son más frágiles y que a menudo se quedan en la periferia de nuestro corazón. Es preocuparse uno del otro en la familia: los cónyuges se guardan recíprocamente y luego, como padres, cuidan de los hijos, y con el tiempo, también los hijos se convertirán en cuidadores de sus padres. Es vivir con sinceridad las amistades, que son un recíproco protegerse en la confianza, en el respeto y en el bien. En el fondo, todo está confiado a la custodia del hombre, y es una responsabilidad que nos afecta a todos. Sed custodios de los dones de Dios.

Y cuando el hombre falla en esta responsabilidad, cuando no nos preocupamos por la creación y por los hermanos, entonces gana terreno la destrucción y el corazón se queda árido. Por desgracia, en todas las épocas de la historia existen «Herodes» que traman planes de muerte, destruyen y desfiguran el rostro del hombre y de la mujer.

Quisiera pedir, por favor, a todos los que ocupan puestos de responsabilidad en el ámbito económico, político o social, a todos los hombres y mujeres de buena voluntad: seamos «custodios» de la creación, del designio de Dios inscrito en la naturaleza, guardianes del otro, del medio ambiente; no dejemos que los signos de destrucción y de muerte acompañen el camino de este mundo nuestro. Pero, para «custodiar», también tenemos que cuidar de nosotros mismos. Recordemos que el odio, la envidia, la soberbia ensucian la vida. Custodiar quiere decir entonces vigilar sobre nuestros sentimientos, nuestro corazón, porque ahí es de donde salen las intenciones buenas y malas: las que construyen y las que destruyen. No debemos tener miedo de la bondad, más aún, ni siquiera de la ternura.

Y aquí añado entonces una ulterior anotación: el preocuparse, el custodiar, requiere bondad, pide ser vivido con ternura. En los Evangelios, san José aparece como un hombre fuerte y valiente, trabajador, pero en su alma se percibe una gran ternura, que no es la virtud de los débiles, sino más bien todo lo contrario: denota fortaleza de ánimo y capacidad de atención, de compasión, de verdadera apertura al otro, de amor. No debemos tener miedo de la bondad, de la ternura.

Hoy, junto a la fiesta de San José, celebramos el inicio del ministerio del nuevo Obispo de Roma, Sucesor de Pedro, que comporta también un poder. Ciertamente, Jesucristo ha dado un poder a Pedro, pero ¿de qué poder se trata? A las tres preguntas de Jesús a Pedro sobre el amor, sigue la triple invitación: Apacienta mis corderos, apacienta mis ovejas. Nunca olvidemos que el verdadero poder es el servicio, y que también el Papa, para ejercer el poder, debe entrar cada vez más en ese servicio que tiene su culmen luminoso en la cruz; debe poner sus ojos en el servicio humilde, concreto, rico de fe, de san José y, como él, abrir los brazos para custodiar a todo el Pueblo de Dios y acoger con afecto y ternura a toda la humanidad, especialmente los más pobres, los más débiles, los más pequeños; eso que Mateo describe en el juicio final sobre la caridad: al hambriento, al sediento, al forastero, al desnudo, al enfermo, al encarcelado (cf. Mt 25,31-46). Sólo el que sirve con amor sabe custodiar.

En la segunda Lectura, san Pablo habla de Abraham, que «apoyado en la esperanza, creyó, contra toda esperanza» (Rm 4,18). Apoyado en la esperanza, contra toda esperanza. También hoy, ante tantos cúmulos de cielo gris, hemos de ver la luz de la esperanza y dar nosotros mismos esperanza. Custodiar la creación, cada hombre y cada mujer, con una mirada de ternura y de amor; es abrir un resquicio de luz en medio de tantas nubes; es llevar el calor de la esperanza. Y, para el creyente, para nosotros los cristianos, como Abraham, como san José, la esperanza que llevamos tiene el horizonte de Dios, que se nos ha abierto en Cristo, está fundada sobre la roca que es Dios.

Custodiar a Jesús con María, custodiar toda la creación, custodiar a todos, especialmente a los más pobres, custodiarnos a nosotros mismos; he aquí un servicio que el Obispo de Roma está llamado a desempeñar, pero al que todos estamos llamados, para hacer brillar la estrella de la esperanza: protejamos con amor lo que Dios nos ha dado.

Imploro la intercesión de la Virgen María, de san José, de los Apóstoles san Pedro y san Pablo, de san Francisco, para que el Espíritu Santo acompañe mi ministerio, y a todos vosotros os digo: Orad por mí. Amen.

© Copyright 2013 – Libreria Editrice Vaticana

El Papa Francisco llamado a restaurar la Iglesia. Leonardo Boff


El Papa Francisco llamado a restaurar la Iglesia 

2013-03-15

  En las redes sociales había anunciado que el futuro Papa se llamaría Francisco. Y no me equivoqué. ¿Por qué Francisco? Porque San Francisco comenzó su conversión al oír al Crucifijo de la capilla de San Damián decirle: «Francisco, ve y restaura mi casa, mira que está en ruinas» (San Buenaventura, Leyenda Mayor II, 1).

Francisco tomó al pie de la letra estas palabras y reconstruyó la iglesita de la Porciúncula, en Asís, que aún existe en el interior de una inmensa catedral. Después se dio cuenta de que era algo espiritual restaurar la «Iglesia que Cristo rescató con su sangre» (ibid.). Fue entonces cuando comenzó su movimiento de renovación de la Iglesia, presidida por el Papa más poderoso de la historia, Inocencio III. Comenzó a vivir con los leprosos y del brazo de uno de ellos iba por los caminos predicando el evangelio en lengua popular y no en latín.

Es bueno saber que Francisco nunca fue sacerdote sino laico solamente. Sólo al final de su vida, cuando los Papas prohibieron a los laicos predicar, aceptó ser diácono a condición de no recibir ningún tipo de remuneración por el cargo.

¿Por qué el cardenal Jorge Mario Bergoglio ha elegido el nombre de Francisco? Creo que ha sido porque se dio cuenta de que la Iglesia está en ruinas por la desmoralización debida a los diversos escándalos que han afectado a lo más precioso que ella tenía: la moral y la credibilidad.

Francisco no es un nombre, es un proyecto de la Iglesia, pobre, sencilla, evangélica y desprovista de todo poder. Es una Iglesia que anda por los caminos junto con los últimos, que crea las primeras comunidades de hermanos que rezan el breviario bajo los árboles con los pajaritos. Es una Iglesia ecológica que llama a todos los seres con las dulces palabras de «hermanos y hermanas». Francisco fue obediente a la Iglesia y a los papas y al mismo tiempo siguió su propio camino con el evangelio de la pobreza en la mano. Entonces escribió el teólogo Joseph Ratzinger: «El no de Francisco a ese tipo imperial de Iglesia no podía ser más radical, es lo que podríamos llamar una protesta profética» (en Zeit Jesu, Herder 1970, 269). Francisco no habla, simplemente inaugura lo nuevo.

Creo que el Papa Francisco tiene en mente una iglesia fuera de los palacios y de los símbolos del poder. Lo mostró al aparecer en público. Normalmente los Papas y Ratzinger principalmente ponían sobre los hombros la muceta, esa capita corta bordada en oro que sólo los emperadores podían usar. El Papa Francisco llegó sólo vestido de blanco. En su discurso inaugural se destacan tres puntos, de gran significado simbólico.

El primero: dijo que quiere «presidir en la caridad», algo que se pedía desde la Reforma y los mejores teólogos del ecumenismo. El Papa no debe presidir como un monarca absoluto, revestido de poder sagrado, como prevé la ley canónica. Según Jesús, debe presidir en el amor y fortalecer la fe de los hermanos y hermanas.

El segundo: dio centralidad al Pueblo de Dios, como destaca el Concilio Vaticano II, pero dejado de lado por los dos papas anteriores en favor de la jerarquía. El Papa Francisco pide humildemente al pueblo de Dios que rece por él y lo bendiga. Sólo después él bendecirá al pueblo de Dios. Esto significa que él está allí para servir y no para ser servido. Pide que le ayuden a construir un camino juntos y clama por fraternidad para toda la humanidad, donde los seres humanos no se reconocen como hermanos y hermanas sino atados a las fuerzas de la economía.

Por último, evitó todo espectáculo de la figura del Papa. No extendió ambos brazos para saludar a la gente. Se quedó inmóvil, serio y sobrio, yo diría, casi asustado. Solamente se veía una figura blanca que saludaba con cariño a la gente. Pero irradiaba paz y confianza. Mostró humor hablando sin la retórica oficialista, como un pastor habla a sus fieles.

Vale la pena mencionar que es un Papa que viene de Gran Sur, donde están los más pobres de la humanidad y donde vive el 60% de los católicos. Con su experiencia como pastor, con una nueva visión de las cosas, desde abajo, podrá reformar la Curia, descentralizar la administración y dar un rostro nuevo y creíble a la Iglesia.

MOSAICO, 7-III-013


HPIM2009

(Familia Oceguera Granados, preparándose para la fiesta. Los maestros José Carlos Oceguera Madrigal y Aida Granados Magdaleno y con ellos, entre otros, Carlos, Alejandra y Justin. Foto de Silviano)

Martínez Campos, 7/III/013

GUIA

MOSAICO

Silviano Martínez Campos

LA PIEDAD, 7 de Marzo.-  NO SÉ SI haya  familias perfectas, más bien creo que no. Familias ejemplares, sin duda las hay en todas partes y en la historia, así como funciona la sociedad, desde luego que muchas, y cada quien que haga su lista. En cuanto a mi propia familia, desde luego que no la voy a calificar, pero sí mencionaré algunas de sus personitas que dejaron huella en mi vida. Desde luego mis abuelos (Petrita, Chente, Mariquita, Pachito) y mis padres (Benita, Chon). Pero quiero referirme ahora, a las mujeres, y doy nombres sólo de algunas que ya se fueron, o que ya traspasaron la gran barrera, hacia la verdadera vida, según creemos.  Mamá Petrita, a quien yo, niño muy puesto en mi lugar de hijo mayor y nieto, llevaba, campo traviesa, ella en su burrito con silla de señora  (camoa creo que se llamaba), hacia Patámbaro, a visitar a su hija, mi tía María. Mamá María (Mariquita), siempre solícita, siempre servicial, siempre afable, sonriente; Mamá Benita, responsable como la que más de los críos y recuerdo cuando, no sé como, llegó al internado a visitar a su crío (yo) porque no aguantó, luego de seis meses, la ausencia; tía Chepa y tía Lucre (ellas siguen con nosotros), por ser ángeles de la guarda de sus padres ancianos; tía Benita Campos (nombre homónimo del de mi mamá) quien a sus casi cien años estaba tan lúcida y rodeada del amor y cuidado de Eulalia y sus demás familiares; tía Rafaila (Rafaela) tan sonriente, tan afable, que sabía compartir hasta una cabeza de ajo, con su sobrina mi madre, tía Rita y tía María,  y tía Eva, esposas y madres, a quienes nunca venció la adversidad;  Sarita, la enferma, quien tantas lecciones nos dio desde la casa del sufrimiento. Honor a ellas y todas las mujeres de mi familia, las de allá y las de aquí, mis amores, que aún nos acompañan, en el Día Internacional de la Mujer, que mañana se celebra.  SÍ, MAÑANA SE celebra y  honor a todas las mujeres que han logrado escalar peldaños planetarios en su consideración, conquistando resistencias del milenario patriarcado y entre nosotros, del destructor machismo. Pero no olvidamos, y las estadísticas nos lo recuerdan que hay mujeres niñas maltratadas, explotadas, mujeres sobrecargadas de pesos familiares, trabajadoras a cual más discriminadas, tratas de mujeres a quienes se explota, que hay víctimas de las infames guerras que aún nos asolan. ESTE MUNDO NO se enderezará si no valoramos a la mujer, que no es un ente aparte, sino la especie misma (“macho y hembra”, varón y mujer,” los crio”). Porque nos dicen los estudiosos que esta civilización en riesgo de perecer, fue estructurada en torno al intelecto masculino y se requiere recuperar el equilibrio inyectándole  afecto, intuición, amor, porque frente a nosotros está el gran reto: o nos amamos, o nos destruimos (se entiende que reconstruyendo el mundo en justicia, verdad y amor). AQUÍ EN LA Piedad, las autoridades municipales ha diseñado un programa, mediante nueve eventos,  desde hoy, hasta el 20 de marzo, para celebrar a las mujeres. Según informó  Eréndira Ramírez Zaragoza, directora del Instituto Municipal de la Mujer, todo comienza hoy con una clase de zumba, por la tarde, en el Teatro del  Pueblo, abierta a todas las personas que quieran ejercitarse mediante la práctica, combinada, de baile, música y ejercicio. Mañana viernes, habrá en la explanada de la plaza principal, una segunda feria de la salud, educación y empleo. Luego, entre otros eventos, el 15 de marzo, un taller de masculinidad en La Casa de Pastoral y el 20 de marzo, en el mismo sitio, taller de redacción y buen uso de las palabras dirigido a jóvenes y además, una conferencia sobre las reglas de buen uso de las redes sociales. ACONTECIMIENTOS EN CASCADA, en nuestro movidito mundo. Ojalá que, entre nosotros, en una empresa que sugiere los trabajos de Hércules, sigan limpiándose las cloacas de la corrupción en los niveles de dirigencias. Lo merecemos los mexicanos y lo merece la nueva administración, si realmente quiere romper con su no tan ejemplar origen en el sistema político anterior y si realmente quiere recuperar el gran humanismo que a través de ese sistema y de nuestra historia, nos legaron nuestros antepasados que forjaron nuestro México. OJALÁ, LUEGO DE su duelo, el pueblo venezolano sea ejemplar en la construcción de lo que se llama socialismo del Siglo XXI. Pero no se hará, ni allí ni en todas partes, sin la democracia participativa. Y en el nivel planetario, pues aún existe la ONU, y quienes transitan por “la red”, saben que su labor, a veces callada, es efectiva. Y eso de nosotros los pueblos, bien puede hacerse real en ese nivel y en todos, a pesar de las infames guerras que aún azotan al mundo. SEA LATINOAMERICANO, africano, norteamericano, o asiático, el nuevo Papa lo será de nuestra Iglesia católica y del mundo. De la Iglesia, por obvias razones: será nuestro dirigente. Y del mundo (parece exageración decirlo, pero no lo es), en cuanto la influencia respetuosa, ante instituciones y pueblos, iglesias, es algo que está fuera de duda. Y aquí, ni los laicos, ni las mujeres, son cero a la izquierda. (www.silviano.wordpress.com).

MOSAICO, 28-II-013


BenedictoXVI-590

(Benedicto XVI, ahora Papa Emérito. Foto de la red)

Martínez Campos, 28-II-013

GUIA

MOSAICO

Silviano Martínez Campos

LA PIEDAD, 28 de Febrero.-  ¡DEVERAS QUE LOS acontecimientos estrujan!. Si es que intenta uno, hasta donde le sea posible, interpretarlos, desentrañar su significado, sin quedarse sólo en la anécdota. Lo que es difícil, porque como vivimos en la sociedad del espectáculo, por lo común lo vemos como tal, sea la renuncia de un Papa, o la detención en vistas de un  juicio, de una alta dirigente sindical. Desde luego, dos acontecimientos importantes, el primero de una amplitud planetaria, el segundo más reducido a nuestro entorno, aun cuando también importante por sus implicaciones sociales para nosotros.  DE VERAS QUE el mundo está revuelto y convulso y que por donde quiera mire uno, no le agarra la hebra por ningún lado. Pero la madeja, el enredo, debe tener por dónde agarrarse, porque de lo contrario, ni caso tendría ocuparse de ello. Es bueno a veces agarrarse de la fantasía, para especular, volar y tratar uno de entender algo y, de paso, testimoniar que a pesar de todo, nuestro porvenir es maravilloso. Con  toda modestia pues, lo (la) invito a que lea estos dos trabajos de su servidor, denominados “El Vuelo de la Oruga” y “La oruga endiosada”, que me hicieron favor de publicarme en GUIA, hace años, y que reproduzco en algunos sitios como www.silviano.wordpress.com y www.lapiedadymiregion.wordpress.com. Si le quitamos algo del Narciso que todos llevamos dentro y de la abultada megalomanía que rebosan, a lo mejor puede que encuentre la benevolencia de algún lector. DESPUÉS DE ESTE breviario inmodesto, cambio de frecuencia para decir que  el mundo no sólo se arregla desde la alta política, desde las curias ni desde los tribunales, aun cuando todo ello sirva de mucho, sino también de los esfuerzos callados, persistentes, amorosos, que echan mano de la ciencia para mitigar sufrimientos y humanizarnos.interface (4)

(INTERFACE, Foto de Presidencia Municipal, La Piedad)

Este viernes y sábado los médicos de INTERFACE, desde California, por 28 años consecutivos atienden a personas con paladar hendido, de nuestra amplia región. Según informó la presidencia municipal, hay más de 200 personas que esperan dicha asistencia médica y son de San Francisco del Rincón y Pénjamo, en Guanajuato; de La Barca y Degollado, en Jalisco; y de Chilchota, Lázaro Cárdenas, Penjamillo, Sahuayo, Yurécuaro y Zacapu en Michoacán. Esos dos días, 35 médicos y personal del organismo altruista, se dedicarán en las instalaciones de la Cruz Roja local, a  atender a los pacientes. Otros datos, son, según la información: “De acuerdo a lo dado a conocer por el Presidente de la Fundación Filantrópica La Piedad, A.C., Armando Saldaña Aguilar, se tienen programadas para este viernes 30 cirugías y para el sábado 59 más entre intervenciones que requieran anestesia local o general, sin embargo, a juicio de los médicos esta cifra puede crecer. El Presidente Municipal, Hugo Anaya Ávila, llegó por la tarde al sitio de las valoraciones para dar la bienvenida a los médicos de INTERFACE y a los pacientes, además, aprovechó para supervisar que tanto pacientes como familiares estuvieran recibiendo la atención y, en su caso, la ayuda en alimentos y alojamiento que se dispuso por parte del Gobierno de La Piedad”. El amor hecho ciencia y técnica, pues. Y como dice el dicho, de aquí en adelante necesitaremos más aquello de “obras son amores y no buenas razones”.  CAMBIO PUES DE frecuencia, para regresar a lo de arriba. Si las autoridades judiciales procesan en justicia, con fundamentos, a una lideresa presumiendo irregularidades, esto sí que está grueso, como se dice regularmente. Las implicaciones del caso, desde luego son políticas, administrativas, sociales, por la relevancia del personaje y la relevancia del sindicato que se considera poderoso. Y las motivaciones de fondo tal vez queden, en los círculos del poder. Y aun cuando el Presidente Peña Nieto no requiera legitimarse, el que sí requiere legitimarse, es el régimen expriista que prohijó al sindicalismo corporativo gracias al cual surgieron liderazgos serviles al sistema y privilegios sin medida para unos  pocos. Tal vez aun cuando no sólo, sea una de las causas de la pobreza de muchos, por la desigualdad que se generó, y ahora se trata de mitigar con cruzadas contra el hambre. Algo queda, de todas maneras. DE MI  IGLESIA, no digo nada. Necesitamos volver “a las fuentes”, como se dice, pero no sólo en el saber y en los textos, sino en el hacer, la práctica de quien cuando su prédica, ni tuvo títulos ni grandes aparatos administrativos. El mundo en convulsión necesita a nuestra Iglesia para su regeneración. Con el respeto a los diversos ámbitos “seculares”, desde luego. Y salud al Papa Benedicto. Y una gran Esperanza de que el próximo Papa sintonice más con este mundo sufriente y con grandes dolores de parto, porque se avecina una nueva era…si no nos destruimos. Es pertinente que agregue al anterior MOSAICO: “Y el último, el 16: “Recordar que al fin de cuentas, todos los trucos son trucos y sólo sirven para ir descubriendo que será la gracia de Dios, la que nos hará felices, porque esa y no otra, es la piedra filosofal”.  

(La Piedad. Flor de Pascua. Foto de Silviano)

( www.ziquitaromipueblito.wordpress.com )

MOSAICO, 21-II-013


HPIM1860

(La Piedad. Foto de Silviano)

 

Martínez Campos, 21/II/013

GUIA

MOSAICO

Silviano Martínez Campos

        LA PIEDAD, 21 de Febrero.- POR LO COMÚN, muchos somos torpes a la hora de presentar una condolencia por alguien cercano, en la amistad o en el trato. Y a lo más que llega uno, ante las fronteras del misterio, es a decir algo así como se nos fue, o se nos adelantó, o descanse en paz. Claro, desde la confesión cristiana, el sacerdote, o el ministro, habrá de proponernos, a familiares y asistentes al rito de despedida, a la misa pues en el caso de los católicos, la Esperanza de que el finado (así decimos también), sigue viviendo. A mi me gusta, a manera de oración, en lugar del descanse en paz, pensar el gracias por su resurrección. GRACIAS, PUES, POR la resurrección de doña Trina, la buena vecina y espero poder asistir un poquito más tarde, pero en esta mañanita, a la misa de cuerpo presente (también así se dice aún), en el templo de El Carmen, en vivo y en directo, pues. Mientras, mis condolencias a don José, a Mari (Miryam), a Pepe, a Jorge y demás familiares y cambio de frecuencia para regresar a ella un poco más adelante. EL MUNDO SE va construyendo, o reconstruyendo en su caso, con sufrires (sufrimiento), esfuerzos, utopías y sueños. Y desde lo grande y desde lo pequeño, para emplear las expresiones no por manoseadas, menos verdaderas. Y desde abajo, en la pequeña comunidad, hasta la “comunidad” (comunidad en proceso) mundial. Y desde los poderes del pueblo, demagogias aparte, hasta los poderes reales planetarios, eso que ni qué, y si no a la buena, por consenso, a la “mala”, por presión de los acontecimientos. Lo vemos todos los días. EN EL NIVEL municipal y digo lo que nos dicen y quien lo dude que lo verifique “in situ”, habrá una segunda planta de tratamiento de aguas negras en lo que de río Lerma queda en La Piedad. El SAPAS, el sistema de agua potable, ya inició los trabajos respectivos, en las inmediaciones de la comunidad de El Cuitzillo. Bien hecho, aun cuando no debe olvidar uno que los problemas nos sobrepasan en niveles, porque las aguas y el entorno, están contaminados desde donde nace, hasta donde muere, supongo, el famoso río (y muchos ríos de México y del mundo y no es ningún consuelo mencionarlo).. LAS VIRTUALIDADES DE las computadoras son formidables, pero no está por demás cultivar el arte popular de las manualidades, entre las juventudes. Y en eso de las artesanías, las etnias son maestras en ese arte, por lo demás con su dimensión utilitaria, cual debe. Así es de que   “Se llevó a cabo, la segunda edición del concurso “Expresa tu Sentimientos” mismo que organiza el Gobierno de La Piedad, que preside el alcalde Hugo Anaya Ávila,  a través del Instituto de la Juventud Piedadense (INJUP) , que dirige  Juan Andrés Rodríguez Ramírez, y donde participaron más de 30 adolescentes entre 12 y 15 años exponiendo manualidades realizadas por ellos para conmemorar de manera creativa el día del amor y la amistad”. GRANDES DEBIERON SER los penares de la hermana Ma. Trinidad Melgoza Valerio. Por mucho tiempo Lupita la auxilió con las necesarias inyecciones. Y en sus días terminales, doña Trina congregó a familiares y vecinos en los rezos del rosario…electrónico. Algún familiar en Estados Unidos, coordinaba la comunicación celular y desde allá, y desde aquí, y desde comunidades, se enlazaban al rezo mediante celulares. La comunidad orante, aprovechando las formidables tecnologías para testificar en los hechos, que Dios Llega al Hombre y para Él no hay barreras, porque también es Soberano en las ondas y dentro de las ondas, donde se pierden las nociones de tiempo y de espacio. AUN CUANDO EN vivo y en directo sea más vital la misa comunitaria, para allegarse uno a las fronteras del misterio que le rodea, cualquier “truco” es bueno. De vez en cuando descuelgo de la pared un artículo, enmicado, del padre Samuel Bernardo Lemus (El Universal, 3-II-1988), que se titula, “La Piedra Filosofal”. El padre comienza por hacer referencia al escritor griego Kazantzaki, y a su concepción de la espiritualidad vital, cósmica, de San Francisco de Asís, que encontró la Piedra Filosofal. Y el padre Lemus enumera 16 trucos para encontrar La Piedra, y los desglosa en su significado: tener un gran ideal, tener fe en el futuro y confianza en la vida; tomar y vivir la decisión de pensar más en lo positivo y bueno que tenemos que en las zonas negras que tendremos qué cruzar; creer descaradamente en el prójimo; dedicarse más a los problemas del prójimo que a los propios; amar sin preguntarse si nos lo agradecerán; despertarse cada mañana como recién nacidos; sonreir aunque no tengamos ganas; aprender de los niños, aprender de los santos; dar tiempo al tiempo sabiendo que las frutas maduran lentamente; no ser demasiado ambiciosos, poco, pero apasionadamente; recordar a diario que tenemos alma y también a ella hay qué alimentarla; hacer, si se puede, un trabajo que amamos o al menos amar lo que tenemos qué hacer; descubrir que casi siempre los disgustos son mayores que los motivos que los causan; creer en algo muy en serio y luchar en ello sin cansarnos. Y el último, el 16: “Recordar que al fin de cuentas, todos los trucos son trucos y sólo sirven para ir descubriendo que será la gracia de Dios, la que nos hará felices, porque esa y no otra, es la piedra filosofal”. (www.lapiedadymiregiondos.wordpress.com).

MOSAICO, 14-II-013


ppbxvi280912A

Martínez Campos, 14-II-013

GUIA

MOSAICO

Silviano Martínez Campos

LA PIEDAD, 14 de Febrero.-   EN ESTOS TIEMPOS calamitosos (así decían los romanos en su tiempo hará más de dos mil años, je), no será por demás para quienes no somos romanos y vivimos en este calamitoso tiempo,  afinar uno sus sentidos de pertenencia, desde luego con orientación biofília, o sea con amor a la vida sea personal, familiar o comunitaria. Porque aunque parece obvio, esos sentidos no se nos dan como caídos de las estrellas (algunos sí, je), sino es una penosa búsqueda, personal tanto como comunitaria. Porque al mismo tiempo pertenecemos a nuestro núcleo familiar, a nuestro ombligo del mundo, sea pueblito, barrio, o gran ciudad; a nuestro gremio, nuestra clase (si se ve así), nuestro rol social. Y si del terruño pasamos a la región, el territorio, el país, el Continente, o la Tierra, la cosa se complica. Y más si pretendemos levantar los vuelos hacia mayores, insondables horizontes.  BIEN RECUERDO cuando falleció el Papa Pío XII, acontecimiento que me agarró sólo en los USA, donde pasé algunos afanes laborales durante alguna temporada. Me sentía un poco parte de la comunidad institucional, con añoranzas de mis años de formación en el internado, de donde no me salieron, (je), sino me salí voluntariamente. Ya cuando Juan XXIII, cambió la cosa y en pleno Concilio Ecuménico me dejé transformar por el nuevo pensamiento papal, y por la efervescencia que se suscitó. Con Paulo VI siguió mi camino de búsqueda, lamenté que el nuevo Papa, Juan Pablo I no fructificara en su sonriente pontificado de un mes, Juan Pablo II, a quien vi pasar por Insurgentes, la gran avenida,  claro que suscitó mi interés por sus viajes planetarios y Benedicto XVI, de quien leí un libro sobre el cristianismo escrito mucho antes de ser Pontífice, pues bueno me llamó la atención por su altura intelectual. Los acontecimientos en torno a muerte y promoción de los pontífices, cimbran y muchos de ellos los pasé en la redacción del diario. De entonces a esta fecha mi comprensión de las cosas, incluidas las eclesiales, ha cambiado y creo que para bien. Acepto que una Iglesia nueva no es imposible y hasta es necesaria en la vorágine del mundo convulso. Ni me escandaliza, aunque más bien lo deseo y lo espero, que se desclericalice mi Iglesia,  se modifique lo del celibato, haya sacerdocio femenino, y hasta que se descentralice totalmente en su funcionamiento. Claro, del deseo al hecho que al parecer se viene, pasarán tal vez generaciones. CON LA DIMISIÓN del Papa Benedicto, apuntan tiempos nuevos. Por la misma inercia de los acontecimientos. Esa renuncia en sí se califica de inédita, por sus circunstancias. Un Papa anciano que reconoce su impotencia para seguir conduciendo la Iglesia católica (en tiempos revueltos dentro y fuera de ella, opino). Desde luego, día con día, mientras no haya nuevo Papa y durante los primeros tiempos de su incipiente pontificado, habrá sorpresas. Y debate, como ya se apunta.  ME LLAMA LA atención un artículo de Leonardo Boff, pensador al que he leído desde hará unos 30 años , titulado “¿Qué tipo de Papa?. Las tensiones en la Iglesia de hoy”, que se puede encontrar en www.servicioskoinonia.org, columna semanal de Leonardo Boff. Hace una crítica de la iglesia tradicional, la del testimonio, como no adecuada ya a nuestros tiempos, y propone otro modo de ser Iglesia, la del diálogo. Nadie espera que de la noche a la mañana cambien las cosas, pero en realidad es el momento adecuado  para que se emprendan cambios de grandes vuelos. Que se haga, o n o, es otra cosa. Dice Boff refiriéndose a estos temas: “)El modelo del testimonio, asustó a muchos cristianos, que se sintieron infantilizados y desvalorizados en sus saberes profesionales; ya no sentían a la Iglesia como un hogar espiritual, y desconsolados, se han apartado de la institución, aunque no del cristianismo como el valor y la utopía de Jesús. El modelo del diálogo ha acercado a muchos, pues se han sentido en casa, ayudando a construir una Iglesia-aprendiz, abierta al diálogo con todos. El efecto ha sido un sentimiento de libertad y de creatividad. Así merece la pena ser cristiano. Este modelo del diálogo se hace urgente, si la institución quiere salir de la crisis en que se ha metido y que llegó a tocar su honra: la moralidad (los pedófilos) y la espiritualidad (robo de documentos secretos y problemas graves de transparencia en el Banco del Vaticano). Debemos discernir inteligentemente qué es lo que actualmente sirve mejor al mensaje cristiano, en medio de una crisis ecológica y social de consecuencias muy graves. Porque el problema central no es la Iglesia, sino el futuro de la Madre Tierra, de la vida y de nuestra civilización. ¿Cómo ayuda la Iglesia en este tránsito? Sólo dialogando y sumando fuerzas con todos los demás. A PEDRO CÓRDOBA Aguirre, de trato afable, lo traté durante su paso por Comunicación Social de la Presidencia de La Piedad, en administraciones anteriores y luego en el DIF cuando fue director..Tal vez en su actuar  público se hayan presentado diferencias partidarias o en relaciones laborales, pero su personalidad afable se impuso, la prueba está en su despedida multitudinaria en el templo. En el “face” mandé mi mensajito expresando como cristiano las “gracias por su resurrección”. En el templo escuché al sacerdote expresar que ya fue recibido amorosamente en la casa del Padre. El mensaje de fondo, pues, del Evangelio. O como se dice en el  primer versito de Romanos, 8. No hay ninguna condenación para quien cree en Jesucristo. Pero como lo vemos ahora, con horizontes insondables para todos,  y para toda la creación. Por eso también tratamos de reparar nuestra casa, el Planeta Extraviado

(  La Piedad.Santuario Diocesano Señor de la Piedad. Foto de Silviano)

(www.lapiedadymiregiondos.wordpress.com)

MOSAICO, 10-II-013


DSCN0802

(La Piedad.Naturaleza bien viva, en el huerto de Lupita. Foto de Silviano)

Martínez Campos, 10/II/013

GUIA

MOSAICO

Silviano Martínez Campos

LA PIEDAD, 10 de Febrero.- CON TODA MODESTIA, porque si no lo digo reviento, he de reconocer el haber recibido el don de la palabra y por lo tanto acepto el deber de, a mi manera necesariamente limitada, servir en cuanto pueda, a esa Palabra. Pero he de reconocer también, que nunca creí tener el don de la previsión ni el buen orden, en la casa del mí mismo, porque de alguna manera me la pasé  “cantando”, al borde siempre de la utopía y de los sueños. De haberme comportado en la vida de manera más práctica y previsora (y aquí está el intríngulis de mi ironía), hubiese aprovechado la contemplación de aquellos  cielos azules de mi campiña, aquél firmamento, pintado con la majestuosidad del misterio en el admirado Camino de Santo Santiago, o sea en lenguaje no mítico, la majestuosa Vía Láctea. Y aquí quiero llegar a lo práctico: almacenar de alguna manera, no en las cuevas de Eolo sino en recipientes apropiados, aquel aire fresco en veces, en veces tibio, pero inocente, no contaminado aún por las efervescencias químicas del hombre civilizado. Me hubiese servido esa reserva de aire, para hacer negocio durante los 27 años en la ciudad de México, donde llegó a decirse que el aire no era tan puro y que por sus efectos contaminantes fenecían miles de personas, indirectamente, claro, aunque no faltaban pajaritos que al parecer caían fulminados. En lo personal, aprovechando esa previsión, se habría evitado que los pulmones quedaran como chimenea, ayudados un poco, o mucho, por el humo del tabaco, entonces no considerado tan mortal. MAS ADELANTE REGRESO a lo del aire y aprovecho el cambio de frecuencia para mencionar algo de mi municipio de La Piedad, el ombligo del mundo dicho sea de paso. Con el programa AMBSE (Adultos Mayores Brindando Servicio a Escuela) mejor conocido como Angeles Verdes, a partir del mes de febrero se realiza una importante serie de actividades de prevención de accidentes a las fueras de escuelas en donde, adultos mayores, brindan apoyo para la facilitación del tránsito vial, así como la protección a la integridad física de alumnos, maestros, padres de familia y transeúntes. Este programa, instrumentado por la Secretaría de Desarrollo Social, estaba suspendido y se reanudará en marzo. Pero la Presidencia Municipal cubrirá el pago correspondiente a febrero, a 40 adultos, para que las escuelas no se queden sin el necesario servicio, informó la dependencia. DICE EL DIRECTOR  del sistema de agua piedadense, el SAPAS, Jorge Rubio Olivares, se han invertido cerca de 24 millones de pesos  en el sistema de micromedición, ya se tiene un 88 por ciento de avance en tomas domiciliarias, y que esa medición ha permitido un control más preciso sobre la distribución del líquido.  “El medir nos ayuda a registrar, en la ciudad y comunidades, los niveles de consumo de agua en las viviendas, comercios y empresas así como detectar y reparar posibles fugas en las redes de distribución”. Y el exhorto de siempre, cuidar el agua. UN CASO MÁS de violencia “incomprensible”, en los Estados Unidos: Una madre mató  a tiros a dos hijos de corta edad e hirió de gravedad a otra hija, para posteriormente suicidarse,  en Denver. En lo que parece continuación de un trágico fenómeno en el gran país, según las informaciones. EN CHINA, ANTE el grave problema de la contaminación, un emprendedor imaginativo (y al parecer con su ironía protestaba por lo mismo), se  puso a vender ¡aire embotellado! y quién lo dijera, con éxito. Ironías aparte, los datos duros conforme a información de la BBC, son estos:La calidad del aire de Pekín se sitúa a menudo en valores perjudiciales para la salud pero el pasado 12 de enero se elevó a 755 puntos, el más alto que se recuerda. El máximo, considerado «muy peligroso», es de 500. Para los estándares occidentales, el crecimiento de China está siendo descomunal. El país dejó 2012 con un crecimiento del PIB del 7,8% en comparación con el 2,2% de la primera economía mundial, Estados Unidos.Y la contaminación es el precio que el país asiático está pagando. Ello fue también objeto de críticas estos días incluso por los diarios chinos que, alertados por los altísimos niveles, llamaron a la reflexión de las autoridades, dice la información.PUES SÍ, NO se puede ignorar lo que pasa, aun cuando lo sabio y razonable para todos es no clavarse en lo trágico, sino buscar las salidas. En nuestro pequeño ámbito, vivir bien y con-vivir. Ni el agua embotellada ni el aire embotellado, ni la agricultura dejada a la agroquímica, ni los bosques dejados a los taladores, ni el planeta dejado a los potentados, son salidas razonables. Hacer cada quien lo que pueda, claro, como muchos en todas partes  y también a los altos niveles, donde las cosas se ven “englobantes” y las salidas también. De hecho, hay conciencias, movimientos, que actúan así. Ni todos los empresarios son depredadores ni todos los políticos son ladrones, ni todos los religiosos son pasivos. Hay más bondad que maldad en el mundo, pero como dijo alguien, los altavoces de los malvados están a mayor volumen. Pero además, hay salidas globales ante la debacle, y mucha gente ya está comprometida en ello. A pesar de las resistencias, se perfila un mundo nuevo, con una gobernanza mundial (gobierno mundial se usa  poco, por sus connotaciones de poderes elitistas, de potencias o de potentados) y un paso ya visto como necesario, es la reforma radical de la ONU, como primer peldaño en la geo-recreación y reforma y control de los organismos internacionales que están al servicio de la globalización de la injusticia. La globalidad como unificación humana, ya no suena, como antes, como utopía, sino como una necesidad de supervivencia de las especies, incluida la depredadora. (www.silviano.wordpress.com).

He dejado de temer a mis temores. P. Emilio González Magaña


(Tomado de GUIA, www.semanarioguia.com.mx )

He dejado de temer  a mis temores

Una de las expresiones más comunes que escucho en el ámbito de la formación al sacerdocio es “tengo miedo”, “mis temores son más grandes que mis deseos de superarlos” o muchas otras semejantes. Podríamos suponer que estos miedos son privativos de los jóvenes que están en búsqueda de su vocación pero no es verdad pues, desafortunadamente, se presenta en muchos adultos que, supuestamente, hemos elegido un determinado estado de vida. En estos días, una amiga mía me invitó a reflexionar sobre el tema de los “temores” con un escrito de Ernest Hemingway, uno de los grandes autores estadounidenses del siglo XX, galardonado con el Premio Nobel de literatura en 1954 y cuyas ansias de aventura y acción le llevaron a desarrollar su pasión por escribir y su deseo por vivir intensamente. Me uno a él para expresar con firmeza: “Temía estar solo, hasta que aprendí a quererme a mí mismo”. Basta de soledades acompañadas que sólo dejan miedos que paralizan, que impiden enfrentar las heridas y asumir con paz la realidad presente.

“Temía fracasar, hasta que me di cuenta que únicamente fracaso cuando no lo intento”. Nuestros enemigos permanentes nos obligan a habituarnos a vivir desde la rutina y, una vez que canonizamos nuestra mediocridad, obviamente nos da miedo lanzarnos a vivir apasionadamente. “Temía lo que la gente opinara de mí, hasta que me di cuenta que de todos modos opinan”. Y lo que es peor, nos critican desde una envidia irracional por lo que hacemos o por el modo como hacemos las cosas y no soportan vernos felices y en paz. La mayoría de las veces ni siquiera están bien informados de nuestras actividades pero les urge destruirnos y hablar mal de nosotros porque así se sienten menos insignificantes. “Temía me rechazaran, hasta que entendí que debía tener fe en mí mismo”. Es sumamente común encontrar a muchos que desde el servilismo y la adulación hacen cosas absurdas con tal de ser aceptados y quedar bien con los demás, especialmente con quienes tienen el poder.

“Temía al dolor, hasta que aprendí que éste es necesario para crecer”. Nos olvidamos que la cruz es imprescindible para vivir de lleno el gozo de la resurrección; que nuestras crisis son positivas cuando las enfrentamos con ánimo de superarlas y crecer, sin quedarnos estancados. “Temía a la verdad, hasta que descubrí la fealdad de las mentiras”. ¡Cuánto daño hace la mentira! Pero tristemente no admitimos que, al integrarla a nuestra forma de vida, tarde o temprano, nos destruirá. “Temía a la muerte, hasta que aprendí que no es el final, sino más bien el comienzo”. Sin embargo, para creerlo verdaderamente, debemos aceptar el riesgo de creer con la cabeza y el corazón que el Señor Jesús ha vencido a la muerte y que nos permitirá encontrarnos un día con quienes ya se han ido. “Temía al odio, hasta que me di cuenta que no es otra cosa más que ignorancia”. Pobres de aquellos que creen que odiándonos podrán destruirnos porque son ellos quienes vivirán frustrados, angustiados y desesperados porque jamás llegarán a comprender el significado del amor.

“Temía al ridículo, hasta que aprendí a reírme de mí mismo”. Y cuando, finalmente, lo logramos qué felicidad experimentamos cuando asumimos que ni somos perfectos y que reírnos de nosotros mismos nos hace más humanos y más comprensivos con los demás. “Temía hacerme viejo, hasta que comprendí que ganaba sabiduría día tras día”. Y damos gracias a Dios por cada día vivido, por cada minuto en el que podemos sentir que tiene sentido nuestra vida, a pesar del cansancio, de la vejez y la enfermedad. “Temía al pasado, hasta que comprendí que es sólo mi proyección mental y ya no puede herirme más”. Y ya no me hiere  porque me decidí a romper las cadenas a las que me había acostumbrado y que ya ni cuenta me daba que me impedían ser libre. “Temía a la oscuridad, hasta que vi la belleza de la luz de una estrella” y la sonrisa de un niño y el amor de una madre y el perdón y la amistad de quien me acepta como soy. “Temía al cambio, hasta que vi que aun la mariposa más hermosa necesitaba pasar por una metamorfosis antes de volar” y porque sé que no sería feliz como era hace algunos años por tanto que Dios me ha dado.

Por todo esto,  “hagamos que nuestra vida cada día tenga más vida y si nos sentimos desfallecer no olvidemos que al final siempre hay algo más. Hay que vivir ligero porque el tiempo de morir está fijado”.